24 de marzo de 2008

All my loving, I will send to you...

(esto va si anestesia, ni correcion, ni nada, como lo iba escribiendo porque todavia no tengo un saxofón)

Querido Perez,

Si resulta que mis sospechas sos ciertas y encontraste mi blog, he aqui mi carta de despedida.

Tu llamado de hoy me destruyó. No me sorprendió, no me llamó la atención, simplemente me destruyó.
Saber que querés tantas cosas, pero sin mí, es demoledor, especialmente cuando yo no quiero nada sin vos.

Lloro hace horas, desde el instante en que dejé de respirar cuando me hablabas hasta ahora que necesito escribirte porque sé que de otra manera no me voy a poner en contacto con vos ni con todas las cosas que me pasan.

Es una pena que tengas tantas cosas que resolver y que sientas que yo soy un parche, que soy una curita que no deja que se cure una herida. Es realmente triste que tu miedo a estar solo, sólo pueda resolverse teniendome lejos. Especialmente cuando necesito tenerte tan cerca.
Hablás de no tapar agujeros, de no reemplazar personas, de destetarte, lo cual es gracioso, porque solo tengo 85 de busto.
Y lo que más me desarma de todo esto es la perspectiva de no verte más. De no saber de tus maposolas, ni de Pablito y sus patés de brócoli, ni de vos, de todo lo lindo que sos.

Y te quedan preguntas pendientes para hacerme y es patético, pero voy a esperar siempre que aparezcas a hacérmelas, porque no te quiero fuera de mi vida.

Porque me voy a enamorar de otro, porque voy a compartir horizontalidades con otras personas, pero a la gente que quise no la quiero fuera de mi vida, porque por algo te dejé entrar en un primer momento. Porque sos un dulce, y lindo, y gracioso, e inteligente, y apasionado, y comprometido con lo que querés.
Lástima que no me hayas querido como para comprometerte conmigo.

Y no es consuelo ser una bizagra, ni un nuevo modelo de lo que buscas, porque no me alegra que de acá a un tiempo estés buscando chicas que se parezcan a mi, si resulta que yo te voy a estar buscando a vos.

Me gustaría haberte hecho bien, haber sido una cosa linda dentro de tantas cosas feas. Ojalá me hubieses elegido para estar al lado tuyo, porque siento que solucionar problemas es más facil si alguien que te quiere te agarra la mano. Y yo te quiero, y para mi no hay nada mas lindo que agarrarte la mano.

Chau, querido, voy a esperar a que aparezcas hasta que me olvide tu apellido, aunque me destroza saber que ninguna de las dos cosas va a pasar nunca.
Te quiero, hasta Disney, hasta Padua, hasta a 5 cuadras de mi trabajo.

(no te preocupes que despues de esto, viene una chica Speed que te pida que te la garches en un gol bordo. Y definitivamente vas a estar a la altura de las circunstancias.)